¿Se pueden usar aceites en la cara sin que nos salgan granos?
La respuesta es sí, pero no todos. Lo de utilizar aceites en la piel de la cara es algo que todavía no termina de convencer a muchas personas, especialmente aquellas que ya de por sí tienen una piel grasa.
Personalmente, creo que se trata de un error. Empecé a introducir aceites en mi rutina hace cosa de un par de años y tengo que decir que es una de las mejores cosas que le han pasado a mi piel. Ayudan a mantener la hidratación, nutren e, incluso, aunque parezca mentira algunos de ellos nos pueden ayudar a regular el sebo en nuestro rostro.
Todavía existe la creencia de que los aceites engrasan la piel, bloquean los poros y, en definitiva, que tienden a provocar granos. Esto es cierto en el caso de aceites como el de coco o el aceite de germen de trigo, que sí se consideran comedogénicos y que pueden empeorar el estado de nuestra piel en caso de que suframos acné. Sin embargo, existen otras opciones que podemos introducir en nuestra rutina sin preocuparnos por los granos. Aquí os dejo algunas de mis favoritas:
Aceite de ricino. Aunque suelo usarlo para fortalecer cejas y pestañas (se trata de un aceite que estimula el crecimiento del cabello), el aceite de ricino también es una opción interesante para el rostro. Es muy rico en omega 9, que ayuda a rellenar la piel, y en vitamina E, así como en sustancias anti inflamatorias que nos ayudan a reducir las rojeces. Su bajo coste lo ha convertido en un aceite muy popular en cosmética. Eso sí, es de los más pegajosos que he probado, así que si vas con prisas a lo mejor no es el más adecuado. Mejor dejarlo para la noche y procurar no pasarse con la cantidad.
Aceite de rosa de mosqueta. Es mi gran favorito, de hecho creo que hay pocos productos que me dejen la piel tan bien. Aporta luminosidad, reduce las manchas, hidrata y es rico en vitaminas A, C y E. Suelo usarlo por las noches porque en algunas páginas de internet lo señalan como un producto fotosensible (es decir, aplicado antes de tomar el sol aumenta las probabilidades de que nos salgan manchas). En otras partes dicen que no, pero bueno, más vale prevenir...
Aceite de jojoba. Si tienes la piel grasa, éste es tu aceite. Se absorbe muy rápido, no deja una sensación especialmente grasa (para ser un aceite) y ayuda a regular el PH natural de la piel y su producción de sebo. Ahora mismo es uno de los que más estoy utilizando y lo recomiendo especialmente a aquellas personas a las que introducir aceites en su rutina les resulte un coñazo, porque el aceite de jojoba es de los menos pringosos que te puedes encontrar. A mí, por lo menos, me ha sorprendido para bien.
Aceite de almendras. Es mi favorito para la doble limpieza facial. Es económico, desmaquilla estupendamente y se recomienda especialmente para pieles sensibles como la mía. Como hidratante me parece perfecto pero hay que reconocer que es un aceite denso que no es apto para el típico día que vas con prisas.
Aceite de argán. Suele hablarse mucho de sus propiedades para el cabello pero el aceite de argán también cuenta con propiedades interesantes para nuestra piel. Es muy rico en vitamina E y en ácidos grasos que ayudan a retrasar la pérdida de colágeno y a mantener la elasticidad de la piel. Por lo que he leído, mucha gente lo recomienda para la zona del contorno de ojos porque ayuda a mantener la hidratación de la piel.
Y vosotros ¿tenéis un aceite favorito para la cara? ¿cómo los incluís en vuestra rutina?
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