Los milagros de la Vitamina B5



Si tu piel es como la mía (seca tirando a desierto del Sáhara), seguro que sabéis que cualquier pequeño empujón que nos ayude a mantenerla un poco más hidratada se agradece muchísimo. Como ya estoy harta de que toda hidratación se me quede corta, la semana pasada me animé a probar un sérum con vitamina B5, para ver si era cierto eso de que la piel se mantenía más elástica y más `jugosa´ durante más tiempo.

La verdad es que el uso de la vitamina B5 en cosmética es más antiguo que ir a pedales, ya que lleva muchísimo tiempo utilizándose en todo tipo de cremas corporales y champús bajo su otro nombre "artístico": el Pantenol. Así que a nada que buceemos en internet es fácil darse cuenta de que el eciente bombardeo de serums con B5 es más una estratégica de márketing que la gran revolución cosmética que nos quieren vender.


De todos modos, reconozco que estoy muy contenta con él. Y eso a pesar de que el primer día que lo estrené estuvo a punto de terminar en la basura porque me provocó una reacción en la mejilla de la que todavía me acuerdo. Decidí darle otra oportunidad en primer lugar porque me costó un ojo de la cara y, en segundo lugar, porque por lo que leí es habitual que este tipo de productos puedan producir una ligera quemazón hasta que la piel se acostumbra a la dosis.

Así que aquí estamos en Pantenol y yo. Todavía no tengo muy claro donde meterlo en mi rutina pero tiene todas las papeletas para que lo termine utilizando aquellas noches en las que descanso de la vitamina C.

Si os interesa probarla, ya hay varias marcas que han lanzado formulaciones de este tipo para hacerse con el mercado de la nueva "vitamina de moda", sobre todo después del éxito que viven la vitamina C y la Niacinamida (de las que hablaremos en próximos posts). El que yo estoy usando es de Skinceuticals, aunque La Roche Posay y The Ordinary cuenta también con sus propias líneas de Vitamina B5 si queréis probar cómo funciona en vuestra piel por un precio más asequible.

Comentarios

Entradas populares